Tras un año de la movilización de sindicatos agrarios en la capital francesa, los manifestantes regresaron a la calle el pasado 14 de noviembre para mostrar su reprobación al acuerdo comercial con el bloque Mercosur. Representaciones agrícolas apuntan que de aprobarse el tratado traería condiciones desiguales para la producción nacional ya que no podrían competir con los productos sudamericanos que tienen precios más bajos y estándares ambientales menos estrictos.