En medio de amenazas y esperanza, millones de venezolanos saldrán a las urnas el próximo domingo
Con multitudinarias movilizaciones en Caracas, el oficialismo encabezado por Nicolás Maduro y la principal figura de oposición encabezada por María Corina Machado y Edmundo González, concluyó la campaña electoral venezolana el pasado jueves 25 de julio. El cierre de la campaña electoral ha estado marcado por lo que algunas personas consideran amenazas de parte del régimen chavista. En los eventos de los últimos días, Maduro ha mantenido el discurso de que él es el único candidato que puede asegurar la paz y estabilidad en Venezuela, e incluso ha hecho alusión a que el país se convertiría en un “baño de sangre” si el “fascismo” gana la elección. A su vez, la oposición ha dicho que en caso de ganar Maduro el país enfrentará la peor crisis migratoria en su historia.
Asimismo, el cierre de campaña se da en medio de la cancelación de las representaciones de observación electoral de distintos países producto de las declaraciones de Maduro y el retiro de algunas de las invitaciones desde el propio Consejo Nacional Electoral. Lo cierto es que Venezuela se encuentra frente a una elección histórica, pero a su vez incierta, en la cual el principal actor es la polarización.