A pesar de la condena de varios Estados y organizaciones de la sociedad civil, el presidente ugandés, Yoweri Museveni, firmó el lunes la ley contra la homosexualidad. Esta legislación castiga con pena de muerte la "homosexualidad agravada", la cual se define como las relaciones homosexuales en las que están implicadas personas seropositivas, niños u otras personas vulnerables. Además, según esta ley cualquier persona condenada por "tentativa de homosexualidad agravada" puede ser encarcelada hasta 14 años.