Protestas en Georgia son reprimidas por los cuerpos policiales del gobierno acusado como prorruso
Georgia atraviesa movilizaciones nocturnas en su gran mayoría contra el gobierno del partido Sueño Georgiano a cargo del primer ministro Irakli Kobakhidze, quien por su negativa expresa a seguir las negociaciones de ingreso a la Unión Europea, ha ocasionado multitudinarias reacciones de protestas ciudadanas concentradas en la capital Tiflis, pero que se han extendido a otras partes del país como Batumi. Los manifestantes apoyan una inclusión futura de su nación al órgano supranacional, por lo que no están de acuerdo con la decisión de su primer ministro de suspender las conversaciones con la UE.
Las protestas habían empezado de forma minoritaria desde que en octubre se celebraron las elecciones parlamentarias, donde Sueño Georgiano obtuvo la mayoría de los escaños y el mando del país. Tales resultados son catalogados por un sector de la población y la oposición como fraudulentos y exigen una repetición con observación internacional de dichos comicios. Esta postura es respaldada por la presidenta del país Salomé Zourabichvili, que pertenece al partido Camino de Georgia, quien junto con el resto de partidos opositores expresan que el oficialismo tiene fuertes lazos con Rusia y que el gobierno georgiano es afín a las disposiciones del Kremlin, hecho que Sueño Georgiano niega de plano.
En la misma línea, el gobierno ha desplegado policías que se han valido de un uso indiscriminado de la fuerza para reprimir las protestas, utilizando cañones de agua y gases lacrimógenos contra los manifestantes. Como resultado, se reportan decenas de manifestantes lesionados y se han documentado decenas de agresiones contra periodistas por parte de las autoridades. Según las cifras del Ministerio del Interior, alrededor de 400 personas han sido detenidas, de las cuales más de 60 se encuentran judicializadas con penas de cárcel, mientras otras siguen con proceso judicial abierto. Asimismo, más de un centenar de ciudadanos fueron multados.
De acuerdo con el gobierno, cerca de 150 policías han resultado heridos producto de los enfrentamientos. Por último, existe un proyecto de ley propuesto por el gobierno en el Parlamento que busca prohibir que las personas partícipes de protestas en contra o a favor del gobierno lleven máscaras. La justificación para esta propuesta legislativa es evitar “acciones delincuenciales”, dado que se han denunciado saqueos en diferentes tipos de comercios.
Fuentes: Europa Press | Euronews | BBC News Mundo