Análisis semanal 558: G7: el poder de la colaboración global – análisis de la agenda y el impacto global de la reunión anual de los líderes mundiales (26 de junio de 2024)

 

En el presente año 2024, la reunión anual de los siete líderes de las principales economías del mundo (G7) ha centrado su influencia y voz para enfrentar y establecer esfuerzos dirigidos a temas como: el importante apoyo económico a Ucrania en la guerra contra Rusia, nuevas advertencias a China en contra de sus prácticas comerciales injustas, impulso sobre plan de cese al fuego en la franja de Gaza, además del llamado ético por parte del Vaticano sobre el uso de la inteligencia artificial en prácticas militares.[1]

El G7: historia del consorcio de potencias mundiales y su composición

Fuente: Yara Nardi, REUTERS.

Esta agrupación surge en el contexto de la crisis del petróleo en 1973. En ese momento, los ministros de finanzas de seis grandes economías globales (Alemania, Estados Unidos, Francia, Italia, Japón y Reino Unido) se reunieron para dialogar sobre el estado de la economía tras el aumento de inflación y la fragmentación del comercio internacional tras la paralización de un producto fundamental en la economía como el petróleo. A raíz de esto, los ministros de las grandes economías formalizaron sus conversaciones y acordaron llamar su reunión como el “Grupo de los 6”. Canadá se incorporó como su séptimo miembro en 1976.[2]

Propósito y relevancia global del Grupo de los Siete

Está organización institucionalizada tiene una presidencia anual que debe ejercer uno de los siete países miembros. Este año la presidencia es encabezada por Italia con la recién electa primera ministra Giorgia Meloni. Parte de su propósito reside en actuar como fuerza estabilizadora en temas económicos, relaciones de poder y retos que afecten a la comunidad internacional, entre muchos otros campos de acción. Dentro de los retos que ha podido enfrentar esta agrupación económica, se encuentran la Catástrofe Nuclear de Chernóbil y la movilización de fondos para combatir enfermedades como Malaria, VIH y SIDA.[3]

Parte de su accionar reside específicamente en la capacidad de incidencia de la agrupación por medio de un documento redactado por el país anfitrión, que promulga una significativa influencia e intervención en aquellos temas acordados por los países sobre la política mundial. Tomando en cuenta que el G7 representa casi la mitad de la economía mundial, poseen una importante e innegable influencia global en las dinámicas económicas, políticas y comerciales.[4]

De la agenda a la acción: temas centrales y figuras destacadas en la reunión del G7

Los temas centrales para la agenda de este año 2024 se centraron específicamente en la guerra entre Rusia y Ucrania, la crisis de migración global, la inteligencia artificial, las amenazas a la seguridad económica global y el cambio climático; seguido de la situación actual en Medio Oriente, la amenaza que representa China con sus prácticas comerciales, de inversión y estrecha relación con Rusia; así como las energías renovables, el continente africano y la región mediterránea e indo pacífica.[5]

Este año se presentan grandes figuras de la escena internacional como el Papa Francisco, Charles Michel (presidente del Consejo Europeo), Ursula Von der Leyen (Presidencia de la Comisión Europea), así como Volodymyr Zelensky, presidente de Ucrania. Se encuentran a su vez acompañadas de los líderes mundiales que componen la agrupación: el primer ministro canadiense Justin Trudeau, el presidente francés Emmanuel Macron, la primera ministra de Italia Giorgia Meloni, el presidente estadounidense Joe Biden, el primer ministro japonés Fumio Kishida, y el primer ministro británico Rishi Sunak.[6]

G7 advierte a China: consecuencias por el apoyo a Rusia y prácticas comerciales desleales

El apoyo de China sobre la base industrial de defensa rusa en el conflicto militar entre Rusia y Ucrania fue parte de la discusión central de la agrupación económica, además de las críticas sobre China ante lo que catalogan como prácticas comerciales injustas y cuestionables por parte de Beijing, debido a la problemática que supone el exceso de capacidad industrial del país, impactando directamente a mercados locales. Ante esto, la presidenta del G7, Giorgia Meloni, aboga por trabajar arduamente en las relaciones económicas con China, en medio de una guerra arancelaria entre este país y Estados Unidos.[7]

 Como respuesta, la administración de Joe Biden planta presión sobre el G7 para una mayor preocupación sobre el tema, exponiendo que “es un "tema crítico" no solo en términos de la guerra de Moscú en Ucrania, sino en el sentido de que podría "representar una amenaza a largo plazo para la seguridad de Europa".[8] Esto además tomando en cuenta la tensa relación entre China y Estados Unidos debido a las sanciones que impuso este último a las empresas chinas que venden semiconductores en Rusia e instituciones financieras que apoyen económicamente vínculos comerciales con el país.

Al mismo tiempo que se ha presentado un aumento de los aranceles tanto desde la Unión Europea como de EE.UU. sobre la importación china de vehículos eléctricos, evidenciando una posición más frágil en los vínculos comerciales con el gigante asiático. Aún así, algunos países desconfían de los prospectos de una guerra comercial con China.[9]

Fortaleciendo Kiev: el G7 y su compromiso con la ayuda a largo plazo

Fuente: GETTY IMAGES

En relación con el apoyo brindado a Ucrania, el G7 expresó una ayuda a largo plazo para el país, el cual recibirá un apoyo de $50 mil millones producto de activos rusos congelados para financiar su presupuesto estatal y poder reforzar la industria de defensa en contra de Rusia. Aunado a esto, se dio la firma de dos acuerdos bilaterales de seguridad con diez años de duración con Estados Unidos y Japón, sumado a un apoyo económico importante por parte de los demás integrantes del foro económico.[10]

El canciller alemán Olaf Scholz expuso que este préstamo por parte del G7 es una clara señal y advertencia para el presidente Ruso, Vladimir Putin, señalando que “se han creado las bases para que Ucrania esté en condiciones de aprovisionarse todo lo que necesite en un futuro próximo, en términos de armamento, pero también de inversión en reconstrucción o en infraestructuras energéticas”.[11]

En temas de seguridad, el acuerdo firmado entre Estados y Ucrania representa un paso más cerca para que este último pueda ingresar directamente a la OTAN. El acuerdo entre estos países establece que, en el caso de un ataque directo a Ucrania, Kiev y Washington procederán con la apertura de diálogos para discutir sobre la posible respuesta ante el ataque, además de formar a las fuerzas ucranianas con ejercicios militares, ciberseguridad y planificación conjunta.

“Nuestro acuerdo de seguridad es un puente hacia el ingreso de Ucrania en la OTAN (...) Hoy es un día verdaderamente histórico”, afirmó con optimismo Zelensky. Entretanto, la administración del presidente Biden afirmó su ferviente apoyo a Ucrania en la guerra, con una cooperación continua en temas de seguridad y defensa militar.[12]

Alto al fuego en Gaza y ética de la IA: debates del G7 en temas actuales

 

Fuente: @G7, x.com

Con respecto a los ataques desde Israel hacia Gaza, el G7 anunció su total soporte y apoyo al plan presentado por Estados Unidos para un pacto de cese al fuego en la franja de Gaza. El plan propuesto por el país norteamericano plantea un plan de tres fases el cual permita la reconstrucción de Gaza, un alto al fuego temporal entre los bandos militares, la liberación de rehenes y heridos, así como la solicitud para abrir rutas a lo largo de la franja de Gaza para recibir y distribuir la mayor cantidad de ayuda humanitaria posible.[13]

Ante este plan los diferentes líderes del G7 se pronunciaron, presentando su total apoyo en un comunicado difundido por la presidencia italiana:

Nosotros, los líderes del Grupo de los Siete (G7), respaldamos plenamente y respaldaremos el plan integral esbozado por el presidente Biden que conduciría a un alto el fuego inmediato en Gaza, la liberación de todos los rehenes y un aumento significativo y sostenido de la asistencia humanitaria" a la Franja palestina, declararon en un comunicado conjunto difundido por Italia, en la presidencia de turno del grupo.[14]

Por otro lado, y en aras del desarrollo militar impulsado por la inteligencia artificial, el Papa Francisco hace un llamado a promover la ética de la IA, por medio de la iniciativa “Llamado de Roma para la Ética de la IA”. Francisco expuso en su discurso que insta a los gobiernos del mundo y empresas privadas a crear un futuro en el que la innovación digital y el progreso tecnológico sirvan al genio y la creatividad humana, y no a su reemplazo gradual.[15]

Además, el Papa Francisco hizo hincapié en que la humanidad no debe perder el control frente a la inteligencia artificial. Remarcó además que el uso de la inteligencia artificial depende de las personas, pero la responsabilidad principal recae sobre los líderes políticos, estableciendo que “ninguna máquina debería elegir quitarle la vida a un ser humano”.[16]

Conclusiones relevantes del G7 2024: reflexiones finales sobre una agenda para el cambio global

Analizando de manera detenida los objetivos y estrategias de la agrupación económica, es posible resaltar algunos resultados que destacaron en la reunión de este 2024. El G7 demuestra una vez más su relevancia global y papel fundamental para abordar los problemas que aquejan a la comunidad internacional, subrayando la importancia de instar a la colaboración multilateral entre los países para enfrentar los retos económicos, sociales y militares que se enfrentan a nivel mundial. 

El firme y dedicado compromiso con Ucrania, es uno de los puntos cruciales de la reunión anual, ya que no solamente fortalece la defensa de Ucrania sino también refleja el compromiso del G7 en proteger la soberanía e integridad de los demás países aliados a la agrupación, enviando su vez un claro mensaje a aquellos países con la intención de considerar acciones bélicas contra sus protegidos.

En relación con la amenaza de China sobre las prácticas comerciales injustas en los mercados locales, se puede observar que el G7 aboga principalmente por la resolución diplomática ante la relación comercial de estos países, instando a buscar una estrategia coordinada que permita enfrentar las amenazas hacia la seguridad económica global.  

Por último, el apoyo al plan de paz por parte de la administración de Joe Biden para construir un escenario de paz en Gaza por medio de la reconstrucción de infraestructura, distribución de ayuda humanitaria, pacto para cesar temporalmente el fuego y la liberación de rehenes y heridos ha permitido observar el compromiso de dicho foro económico con la paz y estabilidad de la región de Medio Oriente.

Notas