La política exterior no suele ser un tema central en las campañas políticas presidenciales en Costa Rica. Tampoco es en la actualidad un tema prioritario para el nuevo gobierno, mucho más interesado en la reactivación de la economía. Sin embargo, ante una nueva administración encabezada por un partido político de nicho, con un líder político nuevo, se abren naturalmente expectativas sobre la política exterior que tendrá el país en los próximos cuatro años.
Al cabo de apenas tres semanas de la toma de posesión evidentemente no es factible esperar una hoja de ruta definida, sin embargo, sí es posible reconocer los primeros atisbos. El primer dato relevante ha sido el nombramiento de la jerarquía del Ministerio de Relaciones Exteriores (MRREE). Arnoldo André Tinoco, el nuevo Canciller, es un personaje cercano al nuevo presidente y fue uno de los financistas de su campaña presidencial. Aunque no tiene experiencia diplomática directa, ha sido cónsul general honorario de Noruega en Costa Rica y asesor legal de las embajadas de Alemania, Suiza, Noruega y Austria en el país. En cuanto a los cargos de viceministros, las designaciones han recaído en funcionarios de carrera del ministerio: Lydia María Peralta, ex embajadora en Alemania y egresada del Instituto Diplomático Manuel María Peralta y Christian Guillermet, también con amplia experiencia en el MRREE. Se trata de señales positivas que refuerzan la profesionalización del MRREE.
A partir de la victoria de Chaves en la segunda ronda electoral se han ido develando algunos posicionamientos en política exterior. El tema de Nicaragua representó una salida en falso para el nuevo gobierno. Chaves afirmó el 4 de abril que estaría reconsiderando el nombramiento de un representante en Nicaragua, país en el que Costa Rica no ha designado un embajador desde junio de 2018. El presidente debió rectificar el 19 de mayo afirmando que “veía lejana la designación de un nuevo embajador en Managua”. En el caso de Venezuela, el nuevo canciller hizo saber el 22 de abril que el país estaría reconsiderando “reconocer” al gobierno de Nicolas Maduro. El anuncio auguraba un cambio en la política exterior de Costa Rica hacia Venezuela, en momentos en que iniciativas continentales que habían pretendido aislar al presidente Maduro, como el Grupo de Lima, han sido prácticamente desarticuladas, y que incluso Estados Unidos, presionado por las consecuencias de la guerra en Ucrania, estaría dispuesto a volver a comprar petróleo venezolano. El anuncio de Chaves fue criticado por sectores de la prensa conservadora y por el Partido Liberación Nacional. Al final, evitando la controversia, las nuevas autoridades dejaron que el gobierno saliente de Carlos Alvarado invitara a la toma de posesión al “auto-proclamado” gobierno encabezado por Juan Guaidó.
Esta toma de posesión supuso la primera oportunidad para los primeros intercambios diplomáticos de la nueva administración. Más allá de los encuentros bilaterales que incluyeron reuniones con el Rey Felipe VI de España, el primer ministro de Curazao Gilmar Pisas, el primer ministro de Marruecos Aziz Akhannouch, el presidente de Colombia Iván Duque, el presidente de la República Dominicana Luis Abinader y la presidenta de Kosovo Vjosa Osmani-Sadriu, la primera acción de política internacional del presidente Chaves ha sido la participación en el Foro de Davos en Ginebra, del 22 al 26 de mayo. Si el primer viaje al exterior de un presidente tiene un carácter simbólico relevante, la asistencia a este evento parece demostrar la orientación económica y comercial que tendrá nuestra política exterior en los próximos cuatro años. Hay que recordar que el 26 de abril la ministra de la Presidencia designada, Natalia Díaz, hizo saber que el Ministerio de Comercio Exterior (COMEX) nombraría a algunos de los nuevos embajadores del país [1].
En Ginebra Chaves hizo una descripción algo sombría sobre el escenario político y económico que heredaba de la administración pasada, pero matizó su intervención diciendo: “Costa Rica is open for Business”, y agregó: "está gira fue una gran vitrina para enseñarle al mundo que Costa Rica está abierta para la inversión extranjera directa y para la generación de más y mejores empleos. En la reunión con CEOs (gerentes generales) les dijimos que, en Costa Rica, ya no hay trabas, lo que hay es alfombra roja y ellos saben que el nombre Costa Rica rima solamente con las mejores empresas del mundo". Durante la visita a Ginebra, el ministro André sostuvo varias reuniones con varios funcionarios de organismos internacionales asentados en esa ciudad y se reunió además con el ministro de Relaciones Exteriores de Ucrania Dmytro Kuleba, a quien expresó “la solidaridad con el pueblo y el gobierno de ese país por la invasión sufrida a su territorio”. [2]
La agenda internacional del país implica definir posicionamientos a muy corto plazo, por ejemplo, respecto a la participación en la próxima Cumbre de las Américas, que se llevará a cabo en Los Ángeles. Y aunque el periodo de transición y acomodo de la nueva administración puede extenderse por meses (incluyendo la designación de un gran número de embajadores), es imperativo empezar a definir una nuestra política exterior que identifique eficazmente nuestros intereses nacionales y se convierta de nuevo en un instrumento para el desarrollo del país.
Notas
[1] Comex asumirá nombramientos de algunos embajadores durante Gobierno de Chaves. Monumental. Recuperado de https://www.monumental.co.cr/2022/04/26/comex-asumira-nombramientos-de-algunos-embajadores-durante-gobierno-de-chaves/
[2] En reunión con el ministro de Relaciones Exteriores de Ucrania, canciller André reitera solidaridad y condena a la invasión a ese país. Ministerio de Relaciones Exteriores. Recuperado de https://www.rree.go.cr/?sec=servicios&cat=prensa&cont=593&id=6683&fbclid=IwAR0th0Sq5jmTbcNCc2hPeJqLsBfM8fZ_8Hjva6dImNr6p0Jaceq8FO-pfG8