Análisis semanal 417: El padre de la bomba (25 de octubre de 2021)

Año: 
2021

 

Héroes o villanos, todo depende del cristal con el que se mire. La historia nunca es un relato acabado o monolítico. El pasado 10 de octubre murió en Islamabad Abdul Qadeer Khan, científico considerado como el “padre” del programa nuclear de Pakistán y un “héroe nacional”. Prácticamente todo el establishment político del país, desde el presidente Arif Alvi y el primer ministro Imran Khan, hasta líderes de la oposición como Bilawal Bhutto Zardari, del Partido del Pueblo de Pakistán, o Maryam Nawaz, de la Liga Islámica de Pakistán (N), exaltaron el papel de Khan en el desarrollo nuclear del país. Bhutto recordó en Twitter que fue su abuelo, el ex primer ministro Zulfiqar Ali Bhutto, quien incorporó a Khan al programa nuclear en 1974, justo después de que la India llevara a cabo su primera explosión nuclear. Cuando el país se recuperaba a duras penas de haber perdido Pakistán Oriental (actualmente Bangladesh), Zulfiqar Ali Bhutto afirmó: “Nosotros los paquistaníes comeremos pasto, incluso pasaremos hambre, pero tendremos nuestro propio programa nuclear”.[1]

Hacía el año 1978, el equipo clandestino de científicos liderados por Khan había logrado enriquecer uranio. La contribución fundamental de Khan al programa nuclear fue la adquisición de un modelo para las centrifugadoras de uranio, que transforman este elemento en combustible apto para armas para material fisionable nuclear. Para el año 1984, el país estaba listo para detonar su primer dispositivo nuclear.

El programa nuclear proveyó al país con una capacidad de disuasión única en el mundo Islámico y que le permitió igualar las capacidades nucleares de la India, su principal enemigo. Para Pakistán, adquirir armas nucleares fue una alternativa a involucrarse en lo que habría sido una ruinosa carrera armamentista convencional con India. Pese a que la rivalidad India-Pakistán persiste y las escaramuzas militares son frecuentes, la obtención por parte de Pakistán de capacidades militares nucleares no vino a allanar el camino a la guerra. Todo lo contrario, tuvo un efector apaciguador de las tensiones. Kenneth Waltz decía al respecto en una entrevista en la Georgetown Journal of International Affair:

La estabilidad en el continente ahora existe; no había existido desde la Segunda Guerra Mundial y la partición de India y Pakistán. Ahora, con armas nucleares en ambos lados, India y Pakistán ya no pueden librar ni siquiera una guerra convencional sobre Cachemira.[2]

Pero el mérito de Khan en el diseño de un programa nuclear que empoderó a Pakistán ubicándolo en el selecto grupo de potencias nucleares del planeta, no le eximió de la controversia. Khan fue acusado de haber diseminado ilegalmente tecnología nuclear entre Estados como Irán, Libia y Corea del Norte. El científico admitió públicamente las acusaciones en 2004, y aunque fue posteriormente perdonado por el primer ministro Pervez Musharraf, debió permanecer bajo arresto domiciliarlo hasta el año 2009.

Pese a este y otros incidentes en su carrera, Abdul Qadeer Khan es considerado por muchos como Mohsin-i-Pakistan (“salvador de Pakistán”), título que aceptaba sin reservas: “Salvé al país por primera vez cuando convertí a Pakistán en una nación nuclear y lo salvé de nuevo cuando confesé y me eché toda la culpa”, dijo Khan en una entrevista en 2008.[3]

La incidencia de Khan en la dimensión nuclear del conflicto entre India y Pakistán, que desde 1947 ha supuesto cuatro guerras convencionales es trascendental. Héroe o villano, Khan es un personaje central de la historia y la geopolítica contemporánea del sur de Asia.

Notas


[1]  Nations mourns Dr. Khan, “Father of nuclear bomb”. The Khaleej Times. October 11, 2021.p. 9

[2] Waltz, K. (2000). Is Kenneth Waltz still m.a.d. about nukes? Georgetown Journal of International Affairs, Winter/Spring 2000, Vol. 1, No. 1 (Winter/Spring 2000), pp. 51-56.

[3] Abdul Qadeer Khan: Nuclear hero in Pakistan, villain to the West. Al Jazeera. Recuperado de https://www.aljazeera.com/news/2021/10/10/abdul-qadeer-khan-nuclear-hero-in-pakistan-villain-to-the-west