Análisis semanal 406: Los efectos del cambio climático del lado en donde “existe el desarrollo” (09 de agosto de 2021)

Año: 
2021

 

Se debe recordar que la comunidad internacional se encuentra ante un gran desafío en la toma de decisión para hacer frente al cambio climático y sus potenciales afectaciones a las actividades de desarrollo humano. Por una cuestión de infraestructura y preparación, cada día en la geográfica mundial se presentan grandes transformaciones en el modo de vida de sus habitantes, así como de sus ecosistemas, todo esto desde pautas meteorológicas que amenazan la resiliencia alimentaria, la calidad de los recursos y también, que promueven el incremento de inundaciones proveniente del aumento del mar. Y el principal desafío y consecuencia de esto, es que las acciones que se han tomado a nivel de adaptación y mitigación son deficientes para coadyuvar la situación (1).

Al ser deficiente su priorización o incluso bajo un esquema de poder desigual notable, se ha perdido el rumbo de las acciones climáticas a nivel global, partiendo de que el desarrollo por si solo es excluyente de las acciones de mitigación y adaptación, así como también de la creencia de que los países considerados como potencias se encuentran lejos de enfrentarse a los efectos devastadores, cuando ciertamente estos son factores clave en el funcionamiento económico, social y político de un territorio determinado (2).

Desde una óptica de ecología política, como menciona Robbins (citado en Contreras 2013), el medio ambiente, así como los cambios ambientales están íntimamente relacionados con los procesos económicos, sociales y políticos. Y en donde para comprender lo que sucede, se debe realizar el análisis desde estos sectores del desarrollo para vincular con la distribución del poder y con las relaciones sociales basadas en la producción y uso de la naturaleza. Es de esta manera que se puede partir que estudiar el ambiente y la política no debe realizarse de manera separada, entendiendo que cada sector puede impactar las decisiones que se tomen con respecto a los otros (3).

A manera de ejemplo, cabe mencionar a Alemania, que en el presente se ve atravesado por la crisis climática. Este país ha vivido hasta ahora una ola de calor en verano en la cual se han podido registrar  temperaturas que codeaban hasta los 46 grados, al igual que se observó con Canadá. Esto no solo puede ocasionar el aumento de la temperatura sino también afectaciones en la salud humana traducida incluso en muertes a causa del aumento de calor (4).

Del mismo modo, con respecto a las inundaciones, han sido lluvias intensas en varias localidades de Alemania, pasando de ser algo estacional a los efectos visibles y posiblemente frecuentes del cambio climático en el continente. Se vuelve acumulación de las precipitaciones y al no contar con medidas de adaptación y prevención, se han generado consecuencias peligrosas en las comunidades que atraviesan de manera directa estos eventos meteorológicos, acaparando más recursos y acciones que potencialmente pudieron no ser utilizadas bajo un esquema de adaptación y resiliencia (5).  

A raíz de esto, la comunidad política y sus líderes han tomado posición con respecto a la situación, la canciller Angela Merkel ha hablado de las inundaciones como un producto de la crisis climática y las deficientes acciones en el tema. Dejando en claro la necesidad de incluir en la agenda de gobierno el tema del cambio climático como prioritario, no solo de estrategias para hacer frente a esta crisis sino a cómo adaptarse entendiendo que la respuesta anticipada reduce los daños materiales y las pérdidas humanas (6).

Es así que se concluye que los países con un desarrollo político, económico y social elevado no se encuentran por fuera de sufrir las adversidades de la crisis climática. Como establece la Convención Marco de las naciones Unidas del cambio climático, los países deben tomar medidas de precaución para prever y reducir al mínimo los efectos del cambio climático en la salud humana y su desarrollo, pensando principalmente en estrategias políticas y económicas más preventivas y de adaptación en función de asegurar los beneficios mundiales al menor costo material, humano y económico posible (7).

Del mismo modo, estas estrategias deben responder a los diversos contextos socioeconómicos entendiendo la diversidad de realidades que componen a un sistema político, del mismo modo, deben ser integrales, de cooperación y pertinentes sobre las emisiones de gases de efectivo invernadero (GEI) prestando atención a criterios científicos (8).

Notas

  1. Naciones Unidas (s.f). Cambio climático. Recuperado de https://www.un.org/es/global-issues/climate-change
  2. Ídem
  3. Calderón-Contreras, R (2013). Ecología política: hacia un mejor entendimiento de los problemas socioterritoriales. Economía, sociedad y territorio13(42), 561-569. Recuperado de http://www.scielo.org.mx/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S140584212013000200010&lng=es&tlng=es.
  4. DW. (2021). No basta con proteger el clima: hay que adaptarse ya al cambio climático. Recuperado de https://www.dw.com/es/no-basta-con-proteger-el-clima-hay-que-adaptarse-ya-al-cambio-clim%C3%A1tico/a-58283093
  5. Shubert, A. (2021). Inundaciones en Alemania devastan comunidades cercanas a ríos: "La situación es surrealista". https://cnnespanol.cnn.com/video/inundaciones-alemania-destavacion-pkg-atika-shubert/
  6. Ibid.
  7. ONU: “Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el cambio Climático”, 1992. [edición electrónica] http://unfccc.int/resource/docs/convkp/convsp.pdf.
  8. Ibid.