El año 2022 será para muchos países un año electoral. En el continente europeo, Hungría tendrá sus elecciones parlamentarias y Francia sus presidenciales. En América, Estados Unidos renovará a la Cámara de Representantes y a los miembros del Senado. Chile, Colombia, México y Perú tendrán elecciones generales. Costa Rica se prepara también para su contienda electoral -con la campaña comenzando de manera oficial en octubre de este año- y, Brasil se enfrenta a un panorama convulso con la figura del líder de izquierda y expresidente Luis Inácio “Lula” da Silva, quien confirmó su intención de postularse y enfrentar al actual presidente Jair Bolsonaro. [1]
Esto debería preocupar a Jair Bolsonaro, no sólo por la popularidad que tiene la figura de Lula -según las últimas encuestas, el expresidente cuenta con un 49% de aceptación popular, ante los solo 26% de Bolsonaro [2]-, sino por la reciente petición de que se le realice un juicio político (impeachment) por sospechas de corrupción en la compra de vacunas.
A esta petición se le llama popularmente el “superpedido de impeachment” ya que es un conjunto de las otras ciento veinticinco peticiones que se le han hecho a la Cámara de Diputados; setenta y dos peticiones originales, siete adiciones y cuarenta y seis duplicados. Hasta este momento, sólo seis peticiones fueron archivadas, otras ciento diecinueve aún esperan ser analizadas [3]. Las denuncias contienen de todo: las manifestaciones antidemocráticas, las vacunas contra el COVID-19, la mala y tardía respuesta a la pandemia, el manejo de la policía federal, atentados contra los derechos humanos y prevaricato.
En Brasil, el juicio político está normado en el artículo N° 85 de la Constitución Federal y en este se citan los “crímenes de responsabilidad” como toda aquella actuación del presidente que vaya a contrapelo con la constitución, especialmente cuando se refieren a:
“[…] la existencia de la unión, el libre ejercicio del poder legislativo, poder judicial, del Ministerio Público y de los poderes constitucionales de las unidades de la Federación, el ejercicio de los derechos políticos, individuales y sociales, la seguridad interna del país, de la probidad administrativa, las leyes presupuestarias y el cumplimiento de las leyes y las decisiones judiciales”. [4]
La petición fue presentada por representantes de varios partidos, líderes sociales, movimientos populares y cuarenta y seis diputados parlamentarios, y expone:
“[…] en esta petición, son renovados los fundamentos en ciento veintidós denuncias anteriores y se le añaden elementos relativos al manejo desastroso del gobierno federal durante la pandemia del COVID-19; causante de más de quinientas mil muertes hasta el momento, el escándalo de prevaricato durante las denuncias de la adquisición fraudulenta de la vacuna COVAXIN, de origen indo y los más recientes actos oficiales y declaraciones públicas generadoras de inestabilidad institucional”. [5]
Para explicar un poco los “demonios” que atormentan a Jair Mesías Bolsonaro y su camino a la reelección, se deberá tomar atención a lo siguiente.
- Crímenes contra la existencia de la Unión.
Se le atribuye cometer este crimen debido a las constantes -y repetidas- manifestaciones de hostilidad hacia otros países, agravadas por el contexto de la pandemia. Un ejemplo de esto, es la disputa que el presidente Bolsonaro entabló con Emmanuel Macron, presidente de Francia, Michelle Bachelet (expresidenta chilena y alta comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos) en el marco de los incendios que consumieron grandes extensiones de la Amazonia. [6]
Durante la disputa con el presidente Macron; el mandatario francés informó que la situación de los incendios en la Amazonia formarían parte de la agenda del Grupo de los Siete (G7), Bolsonaro respondió burlándose de la esposa de Macron, Brigitte. La respuesta de Macron, en la reunión de los G7, fue:
“Después de su ataque irrespetuoso a mi esposa, es triste para Brasil y las mujeres brasileñas. Pienso que las mujeres brasileñas deben tener vergüenza de ese comportamiento. Como yo tengo respeto por el pueblo brasileño, espero que tengan pronto un presidente que se comporte a la altura.” [7].
- Crímenes contra el libre ejercicio de los poderes legislativo y judicial y de los poderes constitucionales del Estado.
Actitudes como las protestas lideradas por el mandatario que exigían defender el AI-5 (Acta Institucional N° 5) -uno de los actos emitidos en el marco de la dictadura militar brasileña después del Golpe de Estado de 1964, este documento otorga permiso al mandatario de decretar el receso del Congreso Nacional, de las Asambleas Legislativas y de las Cámaras Concejales, atentando contra la división de poderes en el país [8] y otras garantías constitucionales-,
El presidente critica fuertemente a los líderes del congreso, los gobernadores y alcaldes que impulsan las medidas preventivas contra el COVID-19, que Jair Bolsonaro considera como una “gripecita” [9], la carta presentada ante la Cámara de Diputados expresa:
“[…] al fomentar personalmente estas manifestaciones, con símbolos históricos de supresión de libertades y garantías de la ciudadanía y de la persecución política, el jefe del Poder Ejecutivo fomentó la obstaculización de la representación parlamentaria democrática, amenazando la permanencia en el cargo del entonces presidente de la Cámara de Diputados.” [10].
- Crímenes contra el ejercicio de los derechos políticos, individuales y sociales.
En este apartado, se critica el accionar no sólo del presidente, sino de varios miembros de su gabinete que en repetidas ocasiones han manifestado posicionamientos en contra de poblaciones históricamente afectadas; la población afrodescendiente, indígenas y miembros del colectivo LGBTIQ+. En los primeros 300 días de la gestión de Bolsonaro, según datos de la Asociación Brasileña LGBTI (ABGLT), la violencia hacia miembros de la población sexualmente diversa, aumentó en un 60%: insultos, negación de acceso a los baños, restricciones en lugares públicos, amenazas, etc. [11] Una de las primeras acciones como presidente fue intentar transformar el Ministerio de Derechos Humanos al Ministerio de la Mujer, Familia y Derechos Humanos, pero en ningún lugar de su plan de transformación incluye de manera explícita a la población LGBTIQ+, sin contar los discursos que exaltaban el machismo y la doctrina cristiana conservadora, además de prometer combatir la “ideología de género” en el país.
- Crímenes contra la seguridad interna.
Este apartado incluye todas aquellas omisiones o acciones negligentes ante sus obligaciones determinadas por las leyes federales, en este apartado se resalta mayoritariamente la postura que el mandatario ha tomado ante la pandemia del COVID-19.
Al caso se le ha llegado a llamar el Caso COVAXIN o COVAXINGATE e investigan las ilegalidades en el contrato de la compra de la vacuna india, COVAXIN, contra el COVID-19, según documentos de la Comisión Parlamentaria de Investigación sobre el COVID-19 (Comissão Parlamentar de Inquérito, CPI), el contrato con el gobierno brasileño vende las vacunas a quince dólares estadounidenses (US$15), que son alrededor de ochenta reales brasileños, cuando el precio inicial que la empresa Bharat Biotech había propuesto era de un dólar con treinta cuatro centavos estadounidenses (US$1.34) [12]
En Brasil habita el 2,7% de la población mundial y, según datos del periódico The New York Times, han registrado un 13% de los fallecimientos por COVID-19 en el mundo. También exponen que “[…] el presidente Jair Bolsonaro ha liderado una respuesta sorprendentemente indolente, desdeñosa y caótica de la crisis del coronavirus que ha dejado a Brasil más pobre, más desigual y cada vez más polarizado”.
[13]
- Crímenes en contra de la probidad administrativa.
En este, se incluyen aquellas acciones “[…] resultantes de su postura en relación a actos ilegales, insensatos o desatinados llevados a efecto por subordinados, o que revelen que el denunciado nunca estuvo a la altura de la responsabilidad del cargo que ocupa” [14]. Aquí surge de nuevo el caso COVAXIN, específicamente las denuncias de Luis Ricardo Miranda -jefe de importaciones del Ministerio de Salud de Brasil-, y Luis Miranda -diputado afín del gobierno de Bolsonaro y hermano de Luis Ricardo-, donde expresan “presiones atípicas” de sus jefes para lograr la negociación, además de que existían muchas inconsistencias en los documentos de compra. [15]
- Crímenes contra la las leyes presupuestarias y de los dineros públicos.
Durante la gestión de la pandemia del COVID-19, Jair Bolsonaro dedicó recursos a medicamentos sin eficacia comprobada; como la cloroquina a la que el presidente se refiere como un “tratamiento precoz”. Sin embargo, el ministro de Salud de Brasil, Marcelo Queiroga, cardiólogo, expresó que para él no había evidencias comprobadas de la eficacia de esos medicamentos. El medicamento, ya ha sido distribuido en la red de salud pública brasileña -desde mediados del año pasado. Este medicamento es utilizado para combatir enfermedades como el paludismo y la malaria, y los asesores médicos de Bolsonaro aseguran que el uso de este de manera “preventiva” reduce la virulencia del COVID-19 y que esto podría aliviar la presión sobre los servicios de salud. [16] Se critica también la falta de un plan de comunicación que fomente el distanciamiento social, el uso de mascarillas y evitar las aglomeraciones.
- Crímenes contra el cumplimiento de las decisiones judiciales.
Finalmente, se le reclama a Jair Bolsonaro las acciones que tomó en contra de poblaciones indígenas, pueblos originarios de la región y del medio ambiente. El portal de noticias brasileño, G1 Globo explica:
“[…] en lo que respecta a los pueblos indígenas, las medidas derivadas de la sentencia de la Corte Suprema en materia de protección contra la propagación del nuevo coronavirus fueron deliberadamente impedidas por el Gobierno Federal, con la colusión presidencial sin disimulo, situación que se extendió a otras decisiones de tribunales federales y de la Corte Internacional” [17]
La decisión de la Corte Suprema a la que hace referencia el párrafo anterior, tenía que ver con la obligación impuesta a adoptar medidas que contuvieran la propagación del COVID-19 en territorios indígenas, hasta se pidió una intervención para retirar a los mineros ilegales que habitan en esos territorios, cuya presencia aumenta el riesgo de contagio. El gobierno tuvo que instalar una treintena de barreras sanitarias, una sala interdisciplinaria para implementar las medidas y garantizar a la población acceso al sistema de salud, con más de 600 muertos -en el año 2020- y 22 000 contagios de COVID-19, denuncian un genocidio por omisión y negligencia del gobierno de Bolsonaro.[18]
En cuanto al caso COVAXIN o COVAXINGATE, el pasado tres de julio, la magistrada Rosa Weber -miembro de la Corte Suprema de Justicia de Brasil- autorizó la investigación para determinar si Jair Bolsonaro cometió prevaricato y otros delitos dentro del marco de las negociaciones, la Fiscalía General de Brasil tiene un plazo de noventa días para investigar las irregularidades [19], pero como observamos, el mandatario tiene mucho más de que preocuparse.
En relación con el proceso de impeachment y el “superpedido”, se busca presionar a Arthur Lira -presidente de la Cámara de Diputados- para que dé inicio a alguno de los pedidos de impeachment hacia el mandatario. Se ve como algo poco probable por dos razones: Lira es aliado de Bolsonaro y, si se decide a dar el paso, necesitaría de dos tercios de los diputados y “[…]Bolsonaro, a pesar de la caída de su popularidad, cuenta con el apoyo de una heterogénea coalición de partidos conservadores” [20]
El camino hacia la reelección se ve difícil para Jair Bolsonaro. No sólo por este “superpedido”, ni por la investigación del caso COVAXIN, sino por que la figura de Lula Da Silva -y el peso que su partido tiene en Brasil- promete una competencia difícil para permanecer como residente del Palacio de Planalto.
Notas
[1] Carranza, D. (20/05/2021). Lula da Silva assegura que será candidato en las presidenciales de Brasil contra Jair Bolsonaro. Agencia Anadolu. https://www.aa.com.tr/es/mundo/lula-da-silva-asegura-que-ser%C3%A1-candidato-en-las-presidenciales-de-brasil-contra-jair-bolsonaro/2249105
[2] EFE (25/06/2021). Lula dobla en intención de voto a Bolsonaro para las elecciones de 2022 en Brasil. Agencia EFE. https://www.efe.com/efe/espana/mundo/lula-dobla-en-intencion-de-voto-a-bolsonaro-para-las-elecciones-2022-brasil/10001-4571482
[3] Agência pública (s.f). Os pedidos de impeachment de Bolsonaro. https://apublica.org/impeachment-bolsonaro/
[4] República Federativa de Brasil. (1988). Constitução da república federativa do Brasil. Presidência da República, Casa Civil. http://www.planalto.gov.br/ccivil_03/Constituicao/Constituicao.htm
[5] G1. (30/06/2021). “Superpedido” de impeachment de Bolsonaro: leia o documento. G1 Globo. https://g1.globo.com/politica/noticia/2021/06/30/superpedido-de-impeachment-leia.ghtml
[6] Estrada, G. (10/09/2019). La dañina política exterior de Bolsonaro. The New York Times. https://www.nytimes.com/es/2019/09/10/espanol/opinion/bolsonaro-bachelet-macron.html
[7] Perfil. (26/08/2019). Bolsonaro se burló de la esposa del presidente francés y este le respondió. Revista Perfil. https://www.perfil.com/noticias/politica/jair-bolsonaro-se-burlo-esposa-presidente-francia-emmanuel-macron-y-este-le-respondio.phtml
[8] Enciclopedia Colaborativa Cubana. (s.f). Acto Institucional Número Cinco. https://www.ecured.cu/Acto_Institucional_N%C3%BAmero_Cinco
[9] AFP. (19/04/2021). Intervención militar y cierre del Congreso piden seguidores en concentración con Jair Bolsonaro. El Universo. https://www.eluniverso.com/noticias/2020/04/19/nota/7817757/intervencion-militar-cierre-congreso-piden-seguidores-concentracion/
[10] Ibid
[11] Valverde, V. (09/11/2019). En 300 días del gobierno de Bolsonaro, violencia contra población LGBTI se incrementó en 60%. EL MUNDO.CR. https://www.elmundo.cr/mundo/en-300-dias-del-gobierno-de-bolsonaro-violencia-contra-poblacion-lgbti-se-incremento-en-60/
[12] Redacción. (23/06/2021). COVAXIN: entenda as suspeitas sobre compra da vacina indiana por governo Bolsonaro. BBC NEWS BRASIL.
[13] Londoño, E. Milhorance, F. (24/06/2021). Brasil supera las 500.000 muertes por covid y la tragedia no amina. The New York Times. https://www.nytimes.com/es/2021/06/24/espanol/brasil-covid-muertes.html
[14] Ibid.
[15] Rede Brasil Atual. (28/06/2021). De qué se trata el caso COVAXIN, la nueva investigación que acorrala a Bolsonaro. Noticias de América Latina y el Caribe (NODAL). https://www.nodal.am/2021/06/brasil-de-que-se-trata-el-caso-covaxin-la-nueva-investigacion-que-acorrala-a-bolsonaro/
[16] EFE. (8/06/2021). El ministro de Salud niega la eficacia de los remedios que Bolsonaro defiende. Agencia EFE. https://www.efe.com/efe/espana/sociedad/el-ministro-de-salud-niega-la-eficacia-los-remedios-que-bolsonaro-defiende/10004-4557367
[17] Ibid.
[18] Brasilia (AFP) (06/08/2020). Corte Suprema de Brasil ratifica medidas contra la COVID en tierras indígenas. FRANCE24. https://www.france24.com/es/20200805-corte-suprema-de-brasil-ratifica-medidas-contra-la-covid-en-tierras-ind%C3%ADgenas
[19] EFE. (03/07/2021). Fiscalía tendra 90 días para investigar a Bolsonaro por compra de vacunas anticovid. MILENIO. https://www.milenio.com/internacional/brasil-fiscalia-investigara-bolsonaro-compra-vacunas-anticovid
[20] INFOBAE. (30/06/2021). La oposición de Brasil presiona con un “superpedido de impeachment” contra Jair Bolsonaro por su gestión de la pandemia. MONUMENTAL. https://www.monumental.co.cr/2021/06/30/la-oposicion-de-brasil-presiona-con-un-superpedido-de-impeachment-contra-jair-bolsonaro-por-su-gestion-de-la-pandemia/