Durante el 2020, surgieron una serie de coyunturas y acontecimientos que conllevaron a que las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TICs) fueran utilizadas con mayor regularidad, al haberse convertido en uno de los medios principales de dialogo y contacto entre los seres humanos; esto, por la condición de confinamiento, debido a la pandemia del COVID-19. Es ante ello, que, si bien, desde hace algún tiempo, los escenarios sociopolíticos ya se venían posicionando en las TICs, movimientos sociales como lo fue “Black Lives Matter” y elecciones como las de Estados Unidos, evidenciaron el peso e influencia que tienen las TICs en la era actual.
La Construcción Social de la Tecnología (SCOT, por sus siglas en inglés), sostiene que la acción humana da forma a la tecnología [1]. Sin embargo, en la construcción de la teoría del determinismo tecnológico, se cree que la tecnología determina la acción humana y la tecnología es producto del entorno social, político, económico y cultural en el que se encuentra [2].
Recuerdo que, durante las votaciones y resultados de las elecciones presidenciales de Estados Unidos, cuando le preguntaba a mis colegas y familiares sobre la cantidad de votos y cómo iba el avance en cada Estado, la mayoría me comentaba que estaban dándole seguimiento a los resultados por medio de Google, con solo escribir en el buscador “Resultados de las elecciones de 2020 en EE.UU.”.
Imagen 1: Resultados de las elecciones de 2020 en EE.UU. (Google)
Fuente: Elaboración propia a partir de imagen en Google.
Los noticieros más grandes y reconocidos del mundo se basaban en este calculo de la plataforma de Google, para brindar sus opiniones y comentarios. Inclusive, algunos de ellos, en ciertas ocasiones se encontraban más atrasados con sus resultados que esta plataforma, lo que conllevaba a que las y los ciudadanos priorizaran y optaran por este medio digital antes que los medios tradicionales como la televisión y periódicos. Esto, por la inmediatez, precisión y facilidad de este medio.
Es de esta forma, que la tecnología se posicionó en gran medida con los resultados de estas elecciones. Además, que estos resultados tomaron un poco más de tiempo de lo usual para ser concretados, por lo tanto, para las personas que contaban con una computadora o teléfono con internet, se les facilitó aún más el uso de esta plataforma para comprender y analizar el rumbo de los votos.
Sin embargo, las TICs no solo tuvieron incidencia en los resultados. Si no, que meses después de haber declarado a Joe Biden como presidente electo de los Estados Unidos, las redes sociales, tomaron un papel prioritario de la comunicación entre Donald Trump y sus partidarios, al haber utilizado plataformas como Twitter y Facebook, para incentivar a que estos interrumpieran con violencia el Capitolio. Es ante este accionar, que Mark Zuckerberg comentó:
“Los impactantes eventos de las últimas 24 horas demuestran claramente que el presidente Donald Trump tiene la intención de usar el tiempo que le queda en el cargo para socavar la transición pacífica y legal del poder a su sucesor electo, Joe Biden (…) Creemos que los riesgos de permitir que el presidente continúe usando nuestro servicio durante este periodo son simplemente demasiado grandes. (…) Por lo tanto, estamos extendiendo el bloqueo que hemos colocado en sus cuentas de Facebook e Instagram de manera indefinida y al menos durante las próximas dos semanas hasta que se complete la transición pacífica del poder.” [3]
Asimismo, Twitter, suspendió la cuenta de Trump por “infracciones repetidas y graves de política de Integridad Cívica” [4]. Por lo tanto, es ante este escenario, que se evidencia el peso que tiene la práctica de la política y diplomacia digital, poniendo en debate la Construcción Social de la Tecnología. Esto porque, si bien los accionares del presidente Trump no fueron los correctos, se debe de cuestionar, hasta que punto van a ser tomados en cuenta derechos fundamentales como “la libre expresión”, principalmente, porque estas redes sociales no tienen un costo para utilizarlas o para publicar opiniones, sin embargo, son empresas privadas que, con este acontecimiento, demostraron su posición ante los entornos sociales, políticos, económicos y culturales a los que se enfrenta.
Es ante ello, que es un hecho que nos encontramos ante una injerencia directa de las TICs y redes sociales en la cultura política, ya que es por medio de estas que el presidente Trump ocasionó un intento de insurrección. No obstante, debe también tomarse en cuenta que este ex mandatario ha usado las redes sociales para manejar un perfil de político específico en la actualidad, y es con la actual suspensión de su cuenta, que se ve implicada una relación estratégica para las grandes potenticas, ya que, si esto sucedió con el Presidente de los Estados Unidos, puede suceder también con otros países y puestos de representación, para los cuales, las TICs y redes sociales constituyen un “canal” de comunicación directo e inmediato con la ciudadanía.
De modo que, debemos de cuestionarnos el papel de las TICs y redes sociales en nuestro diario vivir, ya que, si bien son herramientas exitosas para comunicar información verídica, al instante, de resultados electorales como sucedió con Google, también actualmente han dejado de lado su “neutralidad” ante debates públicos.
Notas
[1] Yousekifhah, S. (2017). Sociology of innovation: Social construction of technology perspectiva. AD-minister, (30), 31-43. https://dx.doi.org/10.17230/ad-minister.30.2
[2] Ibid.
[3] Clayton, J., Kelion, L. & Molly, D. (7 de enero de 2021). Asalto al Capitolio: Facebook e Instagram bloquean a Donald Trump al menos hasta que se complete el traspado de poder. BBC News. Recuperado de https://www.bbc.com/mundo/noticias-internacional-55575310
[4] Ibid.