Análisis semanal 202: Momentos tensos para la democracia y los Derechos Humanos. Procesos electorales en Italia, Hungría y Suecia (14 de marzo de 2018)

Año: 
2018
Autor(es): 

 

Hasta ahora las tendencias populistas nacionalistas habían logrado mantenerse al margen del gobierno en los países de la Unión Europea (UE). Los casos de Holanda, Francia y Alemania si bien representaron –y aun representan- una importante afrenta para la integración europea y para la democracia en general, no lograron consolidar mayoría legislativa ni atentar contra el establishment de forma contundente. En Alemania, el partido ultraderechista Alternativa para Alemania obtuvo un 13.1% de los escaños legislativos (1). En Holanda, el discurso islamófobo del candidato Geert Wilders si bien encontró asidero en un importante sector de la población no logró hacerse ni con el poder ejecutivo ni con la mayoría parlamentaria, obteniendo así una nada despreciable suma de 20 diputados, pero opacada debido a la elevada fragmentación resultante del parlamento holandés; y finalmente en Francia el Frente Nacional de Marine Le Pen no logró hacerse con la presidencia.    

No obstante, la tensión aumenta. Recientemente acontecieron las elecciones generales en Italia (2), esto tras la decisión de Sergio Matarella de disolver el parlamento en diciembre de 2017. El proceso electoral finalizado este pasado 6 de marzo dio como resultado a una Italia que se ha convertido en el primer país de Europa Occidental en donde las fuerzas antiestablishment suman mayoría parlamentaria. El Movimiento 5 Estrellas y La Liga del Norte, a pesar de ser técnicamente agrupaciones que compiten entre sí, poseen las mismas tendencias euroescépticas, soberanistas, y anti-inmigratorias. A esto se le suma el descalabro electoral de la izquierda que obtiene su peor resultado histórico desde 1943, un lamentable 18%(3).

Fuera de occidente, en Hungría se aproximan las elecciones legislativas en abril de 2018, en las cuales la agrupación hegemónica de corte nacionalista y ultraconservadora Fidesz aparece con en una amplia ventaja de más del 40%. La agrupación más próxima a Fidesz es Jobbik, también de extrema derecha con un 15%. El populismo xenófobo de Orbán parece nutrir cada vez más a la extrema derecha húngara. La oposición socialista, por otro lado, se encuentra ampliamente fragmentada y deslegitimada por casos de corrupción, y herida por la huella que dejó el estalinismo en los países del otrora Bloque del Este. Ello se refleja en un lejano 12% para la agrupación socialista Együtt (4).

Estas tendencias también se dan fuera de la UE. En setiembre de 2018 se darán las elecciones en Suecia, las cuales tienen como característica a tomar en consideración el crecimiento que ha mostrado el partido ultraderechista Demócratas Suecos, liderado por Jimmie Åkesson. A pesar de que Suecia –al igual que el resto de países nórdicos- es generalmente vista como un paraíso con condiciones óptimas de vida, no todo es color de rosa. Ni siquiera esta nación escapa a la epidemia de la supremacía blanca. El atentado de Estocolmo en 2015, sumado al aumento de los índices delictivos en regiones donde han llegado inmigrantes producto de la acogida de africanos en 2015, han despertado el malestar de un sector de la población (5). Lo anterior, –es temprano para intentar predecir algo, pero vale hacer la anotación- puede ser capitalizado por la agrupación nacionalista.

Tal como es posible ver, ni los países de la UE, ni los países fuera de ella están exentos del auge de las agrupaciones nacionalistas. A lo anterior se suma un liderazgo de Merkel que tiembla y un Emanuel Macron que contrario a su campaña humanista que lo llevó al poder ha comenzado a incurrir en políticas antiinmigración (6), pero la reflexión va más allá de eso. El voto no solamente es antiinmigración, es anti-sistema político, anti statu quo. Un sector importante de votantes está optando por repudiar las reglas del juego de las democracias formales, y ello en algunos casos encuentra un factor causal en las condiciones económicas y sociales que no logran ser satisfechas; en otros la corrupción política, las problemáticas de seguridad e incluso el desarrollo histórico de las naciones.    

Notas

  1. Mata, A. (2017). Análisis Semanal 163: La Ultraderecha Regresa Al Parlamento Alemán: La Sombra Del Nacionalismo Que Cubre La Unión Europea. Observatorio de la Política Internacional. Recuperado de: http://opi.ucr.ac.cr/node/983.
  2. Pignataro, A. (2018). Análisis Semanal 200: Elecciones Generales En Italia: Incertidumbre Pre Y Postelectoral. Observatorio de la Política Internacional. Recuperado de:  http://opi.ucr.ac.cr/node/1087.
  3. Velasco, I. (6 de marzo de 2018). Italia, primer país de la UE con más del 50% de votos antisistema. El Mundo. Recuperado de:  http://www.elmundo.es/internacional/2018/03/06/5a9dafa0468aeba03f8b4657.html.
  4. EFE. (1 de noviembre de 2017). Hungría celebrará elecciones parlamentarias el próximo 8 de abril. Recuperado de: https://www.efe.com/efe/espana/mundo/hungria-celebrara-elecciones-parlamentarias-el-proximo-8-de-abril/10001-3488965.
  5. BBC Mundo. (14 de febrero de 2018). Cómo Suecia Se Ha Convertido En El Epicentro de La Extrema Derecha Y El Supremacismo Blanco de Europa. Internacionales. Recuperado de: http://www.bbc.com/mundo/noticias-internacional-42954234.
  6. Quiñonero, J. (21 de febrero de 2018). Proyecto de Ley de Inmigración En Francia: Macron Impondrá Cinco Años de Cárcel Por Trabajar Sin Papeles Y Limitará El Derecho de Asilo. Diario ABC. Recuperado de:  http://www.abc.es/internacional/abci-macron-presenta-plan-accion-contra-inmigracion-no-deseada-201802202207_noticia.html.